Suscribirse

Blogs

A modo de memorias
A modo de memorias

A modo de memorias (29)

Sábado 09 de Septiembre de 2017 11:05

Mis Recuerdos

por Juan Alarcón Montoya
Hoy, 18 julio de 2006, he empezado a escribir estos recuerdos de mi vida. La decisión de escribirlos la tenía tomada hace tiempo, ya que venía constatando la escasez de memorias publicadas en España, lo que dificulta la tarea de los historiadores para poder reconstruir, de la manera más fidedigna, la compleja realidad de nuestro país. Por ello, es importante que personas que han vivido hechos históricos importantes nos cuenten con todos los riesgos de subjetivismo y parcialidad inevitables sus vivencias, para que los investigadores puedan contrastar y cribar los hechos para poder hacer una aproximación mayor, a lo ocurrido en tiempos pasados. Considero que las memorias hay que escribirlas con un cierto distanciamiento, cuando uno ha dejado ya la vida profesional o política activa, pero hay tres razones que me han llevado a empezar a escribir estos recuerdos ahora : 1º Una cierta disponibilidad de tiempo, causada por estar convaleciente de una celulitis, infección aguda de la pierna izquierda, que me tiene en reposo, y que me hace cuestionarme si en una de estas no se truncará mi deseo de escribir las memorias y que queden para el general conocimiento. 2º Que he aprovechado este tiempo de baja laboral para, aquí en La Zenia, junto al Mediterráneo y bajo uno de los pocos núcleos de pinos carrascos que la especulación urbanística desaforada va dejando, releer “Atando cabos” de Raúl Morodo, que contribuye a un mejor conocimiento de esa etapa mítica de la Historia de España, que va de la clandestinidad a la transición a la democracia, etapa a la que, algo más tarde que él, me incorporé y viví desde coordenadas parecidas. 3º Porque he sido responsable de que Antonio Rojo Sastre, ex Presidente de Autopistas publicara, con éxito editorial unas memorias en 4 volúmenes, tras sufrir una hemorragia cerebral de la que se recuperó perfectamente y usar como terapia recuperadora la escritura de esas memorias. En julio de 1971 mi maestro, don Rodrigo Fernandez-Carvajal González, que me había alentado a preparar las oposiciones a T.A.C., cuerpo al que él pertenecía antes de sacar la cátedra de Derecho Político de la Universidad de Murcia, me planteó, tras la cuarta convocatoria frustrada, que tomara una decisión o seguir preparando la oposición pero dejando la vinculación a la Universidad (profesor ayudante de Derecho Político) o dedicarme a investigar y redactar la tesis doctoral, encaminándome definitivamente por la docencia universitaria. Fue una difícil decisión, ya que dejar la oposición suponía para mí echar por tierra cuatro años de esfuerzo de preparación, en un momento en que tenía preparado el programa; por el contrario, dejar mi puesto de profesor ayudante suponía quedarme sin ocupación, sin ingresos y sin otra alternativa que depender de resultado azaroso de las oposiciones. Opté por dedicarme a la oposición y corte así mi cordón umbilical con la Universidad, que tan satisfactorio me era personalmente, por lo grato del ambiente de trabajo y la actividad y las relaciones que me proporcionaba. Con esa decisión, y dado que, a pesar de lo escueto de los sueldos universitarios, poseía algunos ahorros, solicité ser admitido en el Colegio Mayor de postgraduados de la Universidad Complutense de Madrid “Menéndez Pelayo”, para lo cual Rodrigo Fernández Carvajal me avaló. En octubre de 1971 inicié mi periplo madrileño, ubicado en el Colegio Mayor “Menéndez Pelayo” sito en la avenida Séneca de la ciudad universitaria de Madrid cercano al Puente de los Franceses y separado del barrio de Argüelles por el parque del Oeste. Estaba rodeado de la mayoría de los Colegios Mayores, tanto españoles como internacionales: Colegio argentino, Guadalupe, Colegio de Brasil, Nuestra Señora de África,…. El director era un gallego, doctor cirujano del corazón del equipo del yerno de Franco Cristóbal Martínez Bordíu en la ciudad sanitaria La Paz y se llamaba Luis Sánchez -Harguindey Pimentel, gordito, bonachón, con familia numerosa, que vivía en los altos del Colegio, y que en la transición desempeñó importantes papeles ya que era Subsecretario del Interior en la época del 23-F y que ha fallecido recientemente. El Colegio tenía unas pocas habitaciones individuales y la mayoría eran dobles, con baños colectivos y servicios de comedor con menú y servicio. Estaba dotado con un servicio de cafetería y un salón, que servía de sala de conferencias. Rodeado de amplios jardines no tenía instalaciones deportivas propias, porque estaba al lado de las universitarias. El Subdirector era un doctor en derecho de Totana que era director de una oficina de Banca Catalana en Madrid. Había una serie de antiguos colegiales que permanecían en el Colegio después o sin haber obtenido su objetivo inicial, preparar una tesis doctoral o unas oposiciones, entre ellos recuerdo a un murciano, que tenía un solo ojo se llamaba Darío y que ejercía de jefe de personal de TVE, a un jienense ingeniero agrónomo Pedro Manuel Damas Rico, que tenía un cargo en Renfe, a un eterno opositor a abogado del Estado Antonio Rodríguez Berrocal, a un doctor en Meteorología Angel Sanromán , que después ocupó el puesto de director general del Instituto Nacional de Metrología, a otro Ingeniero Aeronáutico Andres Alario, que después hizo derecho, ingresó en Hacienda y fue responsable financiero en AENA. Estaba también un farmaceútico peculiar Velasco, que al final obtuvo cátedra en Valladolid. Otro, de esos veteranos, caracterizados por la soltería, que en su mayoría mantienen en uso hasta ahora, era un profesor de veterinaria actualmente con plaza en la Universidad de Murcia y de origen cordobés, se llama Pedro Ponce. Mi primer compañero de habitación fue el médico anestesista gallego llamado Manolo, el siguiente fue el malagueño Juan Pérez-Lanzac que era veterinario y trabajaba en un laboratorio y se casó con una cordobesa, el siguiente fue un alicantino David Beltrá y Esteve que preparaba también T.A.C., era un bon vivant, cazador empedernido y amante de las juergas, y que dejó las oposiciones, se casó con su novia farmaceútica de Albacete y se marchó a vivir a Alicante, donde ingresó como Técnico de la A.I.S.S. y allí sigue ahora en la Delegación…
Página 3 de 3

Canción Destacada

Diseñado por:
Jaitek