Classicauto 2011
El año pasado estábamos encantados de contar con dos ferias de vehículos clásicos en Madrid, ya que a la habitual Retromovil, se unía Classicauto. Pues bien, nuestro gozo en un pozo, ya que Retromovil no se celebró, según parece por falta de expositores dispuestos a pagar la cuota de participación en el salón.
Estas vicisitudes originaron un poco de recelo en el mundillo de los clásicos, puesto que podría haberse dado la circunstancia de que ERMEvents no siguiese organizando el salón de clásicos de Madrid, cuestión que afortunadamente no se ha producido y hemos podido disfrutar durante los pasados días 25, 26 y 27 de un salón fantástico, ya que ha habido mucha afluencia de visitantes, muchos expositores, una demostración de coches de gran nivel y alrededor del Palacio de Cristal de la Casa de Campo una nutrida representación de vehículos privados que eran conducidos y exhibidos por sus propietarios como representación de la automoción de épocas pasadas, lo cual solo se puede resumir en que Classicauto 2011 ha sido un autentico éxito.
En lo que a nosotros respecta, el salón comenzó el jueves a mediodía, ya que Cristina Rubio responsable de Classic Cover Ibérica, necesitaba un Porsche 911 y un Mini, de manera que nuestro amigo Andrés Álvaro de Targa Klassic nos puso en contacto, accedimos a la petición, ya que no hay mejor sitio para un vehículo clásico como nuestro Targa, que un salón de clásicos.
El emplazamiento del stand estaba en la planta alta con lo que estuvimos esperando en el inicio de la rampa que hay detrás del pabellón, hasta que remolcaron a los coches de competición que aportaba la firma Seat, y después condujimos el coche hasta la puerta de atrás del salón, quitamos el contacto y unos fornidos jóvenes nos empujaron hasta el emplazamiento del stand, y allí dejamos a nuestro chiquitín, no sin antes preguntar a Maria Garabatos, que es la responsable de prensa, cuando teníamos que recoger el coche al finalizar el salón.
Como es habitual, nuestra visita se produjo el sábado por la mañana y detectamos mucho ambiente, a pesar de que era temprano, y descubrimos la primera novedad, ya que al entrar podíamos ver a chicas como las del un, dos, tres que hablaban con los visitantes ante su sorpresa.
Al subir a la planta alta, lo primero que hicimos fue ir a visitar nuestro Porsche 911 Targa que estaba muy bien vigilado por Cristina, que nos mostró amablemente la textura de las fundas fabricadas en Italia bajo pedido previo de dos meses, lo cual se puede contrastar al espíritu Ferrari, es decir, todo diseño.
A posteriori, echamos un vistazo a la habitual representación de vendedores de piezas para clásicos y aprovechamos para comprar el soporte para la radio de nuestro SEAT 600, que por cierto era la última que les quedaba, con lo que tuvimos mucha suerte.
La estrella en esta planta era sin duda, la exposición de vehículos del departamento de competición de SEAT, del que me quedo con el 1430 de rallies que condujo en su día Zanini en el europeo, pero no quedó ahí la cosa, el stand del RACE, entre otras sorpresas, nos permitió gozar de un auténtico De Dion Button, en perfecto estado, que no se tiene la ocasión de ver todos los días.
En la planta central se encontraba el todo moto, tanto en lo relativo a repuestos como en lo que a ejemplares de dos y tres ruedas se refiere, es decir sin y con side car se refiere, y en medio de todo ese despliegue algo increíble, una Indian como las que se veían en las películas de Charlot. Parece imposible que se pueda hacer una reconstrucción con tanta calidad.
Por otra parte dimos una vuelta por el stand de piezas de Vespa, y parecía un puesto de un mercado, ya que había dos filas de gente esperando para ser atendidos, lo cual confirma que la afición por las Vespa viejas, puede conseguir que estas magníficas motos no sean abandonadas a su suerte, sino que los jóvenes se están interesando por disfrutar de la mezcla de gasolina y aceite, así como del motor de dos tiempos.
Por último bajamos a la planta inferior donde está el todo coches y especialmente los grandes restauradores, pero nuestra sorpresa fue encontrarnos el stand del Espíritu de Montjuic en el que se informaba del evento que tendrá lugar en el circuito de Mont Melo los días 8, 9 y 10 de abril, para revivir las pruebas de formula 1 y otros vehículos que se celebraban periódicamente en el antiguo circuito urbano.
Entre los especialistas en la restauración de clásicos, tuvimos la ocasión de disfrutar con el ejemplar de Aston Martin expuesto por Auto Stórica, que nos trajo inmediatamente a la memoria las películas de James Bond, sin menospreciar los Jaguar Type E, Mercedes 190 SL y algún Austin Healey que quitaban el hipo.
Como especificidades quiero resaltar un precioso Hispano Suiza, y un Mercedes Pontón descapotable, que no son fáciles de ver en otros salones de clásicos.
También quiero destacar el stand de la escudería REPSOL de clásicos, que cuenta entre otros, con un magnifico ejemplar de Renault Alpine 1600, que habitualmente participa en los rallies internacionales de veteranos, como el Montecarlo.
En la parte de fuera del pabellón de cristal, siempre hubo una representación de vehículos antiguos aunque no tan específicos como los de dentro, si bien este año, tanto en las proximidades del pabellón, como en la calle de acceso había una impresionante representación de históricos (mas de 25 años) cuyos dueños habían tenido la amabilidad de mostrar a los asistentes al salón, lo cual provocaba deseos instantáneos en muchos de los visitantes de adquirir ipso facto uno de estos vehículos.
Concluiremos diciendo que nuestro Targa fue recogido el domingo a las nueve al acabar el salón, con la nostalgia de ver como se desmontaba este bonito sueño de tres días, que esperamos continúe el próximo año.